martes, 22 de septiembre de 2015

Cristina Rivera Garza

Escritora mexicana que nace en Matamoros, Tamaulipas en el año de 1964. Estudio sociología en la UNAM, ENEP-Acatlán, la maestría en historia en la Universidad de Houston, así como el doctorado. Su labor docente la ha realizado en la UNAM,  la UAEM, San Diego State University, la Universidad de Pauw, Indiana y el ITEMS. Radica en Estados Unidos desde finales de la década de los ochenta, por tal motivo es una escritora de frontera, reconocida en el mundo literario, su obra se traduce al inglés, portugués, alemán, italiano y coreano.  
     A lo largo de su carrera ha sido merecedora de un buen número de premios, entre los que destacan El premio Sor Juana Inés de la Cruz en 2001 y 2009, Finalista del Premio Iberoamericano Rómulo Gallegos en 2003, Premio International Anna Seghers 2005, Premio Roger Caillois en 2013.
     Sobre la misión de la literatura argumenta, que debe ser una recreación del mundo en el espacio ficcional. Ve como un reto la producción de una obra narrativa, transgresora de las expectativas del mercado literario, es una escritora femenina y feminista porque plantea en su obra la esencia de la mujer que se descubre, que rompe las reglas, que arriesga. En su novela Nadie me verá llorar, publicada en 1999 brinda un acercamiento a un aspecto distinto de la historia de la locura femenina en México, durante el Porfiriato, y el enorme sanatorio “La Castañeda”, en él muestra de manera clara las reglas que el patriarcado impone a las mujeres a principios del siglo XX, época en la cual sino practicabas valores como la abnegación, el sacrificio y la fidelidad estabas condena al encierro, sólo la locura justificaba tal atrevimiento.
      En su novela La cresta de Ilión publicada en 2002, aborda otro tema femenino, la búsqueda de sentido, una doctora, la escritora Amparo Dávila como personaje y la locura como destino final son los actores en esta destacada obra, donde se presenta otra vez el tema de la locura. En el año 2009 vuelve a ganar el Premio Sor Juana Inés de la Cruz con la obra La muerte me da, desde la cual recrea un thriller centrado en la violencia y la sexualidad, adornado con algo de la poesía de Alejandra Pizarnik; otra novela en donde se revela la esencia femenina es El mal de la Taiga de 2012, pues en ella los cuentos infantiles son recreados en un contexto boscoso y un ambiente policíaco, con ese constante “extrañamiento” que menciona Claudia Guillén[1] valioso en sus novelas. 
      Lo admirable de Cristina Rivera Garza es que entrelaza situaciones reales y ficticias de forma impresionante, ya que su obra muestra una experimentada construcción del espacio literario, un delicado tejido, un compromiso con la memoria y un constante cruce de discursos narrativos.
     Ella afirma que el feminismo no tiene nada que ver con estereotipos que insisten en condicionar a la mujer trasgresora, por el contrario, ella presenta en su trabajo a ese tipo de mujer como el personaje central y vuelve su voz una parte esencial del  discurso narrativo feminista.







viernes, 28 de agosto de 2015

Marguerite Yourcenar


Escritora, traductora y dramaturga franco-belga, que se volvió estadounidense por libre elección. Nació el 8 de junio de 1903, con el nombre de Marguerite Clernnewerck de Crayencour, su apellido de escritora es un anagrama del apellido Crayencour. Su madre fallece, así que es educada por su padre, quien le enseña desde niña el latín y luego el griego clásico.
     Ella es una escritora de abundantes mundos, de intensas etapas. Durante la Primera Guerra Mundial vive en Londres; en la segunda Guerra Mundial ya estaba en Nueva York, en esa época es cuando cambia su nacionalidad. Da clases de literatura francesa desde su llegada a E.U, también en ese momento continúa su proyecto llamado Memorias de Adriano que ve concretado en 1951. Durante el proceso creativo varias horas al día leía sobre la historia del emperador Adriano y sobre la historia y la cultura del siglo II;  aprovechaba cada momento libre para escribir, ya sea en el tren, la clase, las bibliotecas, y otros sitios, la urgencia era escribir.
      La historia siempre fue importante en su narrativa, sus reflexiones centran la atención en las relaciones humanas, sin categoría, tan sólo como una presencia que rompe con la monotonía de lo cotidiano y mira en lo profundo del ser. Ella rebasa el límite de los géneros su obra está conformada por una rica variedad de estilos, donde habla sobre diferentes culturas, gracias a su talento fue reconocida su trabajo como el de un gran genio creador. Lo mismo retrata a una Grecia clásica, que a una cultura china o logra un detallado acercamiento a la ideología judeo-cristiana, incluso describe el mundo de los alquimistas.   
    Su novela histórica es considerada una de las mejores en su género, en Memorias de Adriano se plantea un minucioso detalle del flujo de conciencia del personaje principal, en esta novela la voz del emperador se reconoce por medio de su propia historia, de su andar por el reino. Toda su obra presenta esta capacidad de acercarse a las profundidades de las relaciones humanas; también su narrativa rompió con los estereotipos femeninos, las lleva al lado extremo, como en el caso de “La leche de la muerte”, relato incluido en el libro Cuentos orientales publicado en 1938.
     Su variado planteamiento de épocas y lugares se agrandó con el manejo de distintos idiomas, que la llevaron al diseño de una literatura universal cautivada por la historia. En 1968 obtuvo el premio “Femina” por la novela histórica Opus Nigrum, recreada a finales de la Edad Media y en el comienzo del Renacimiento. Su obra en general presenta un equilibrio donde la capacidad humana experimenta una apertura profundamente existencial.
     Marguerite Yourcenar es la primera mujer, miembro de la academia belga y la academia francesa,  lo cual causó varias críticas, pues Lévy Strauss no estuvo de acuerdo con su estrada a ese sitio sagrado para la tribu de hombres y Albert Cohen dijo que su gordura y su fealdad seguro se reflejaban en su obra, alegato carente de lógica, acaso sólo impulsado por misoginia[2].
Ella es la primera mujer en exponer al ser humano sin sexualidad, es tan brillante su novela, su cuento y demás trabajos, como la obra “María Magdalena o la salvación”, donde su voz cuenta la historia que narra el enamoramiento y la entrega total, esa donde se da la vida con gusto, esta recreación de un personaje histórico forma parte de su libro Fuegos, en el cual se cuentan nueve prosas poéticas donde se retoman mitos griegos de Hermes, Safo, Lena, Antígona, Patroclo, Aquiles, Fedón, Clitemnestra y María Magdalena, en una recreación  muchas veces lejana a la original pero que mantiene el genio de la escritora.


domingo, 26 de julio de 2015

Autoras infractoras: Albertine Sarrazin

Escritora francesa nacida el 17 de septiembre de 1937 en Argel, durante la guerra, tal vez por eso su historia es una tragedia. Su padre fue un médico francés, su madre una empleada española a la cual le obligó a dejar en un orfanato a su hija, para luego el mismo adoptarla e integrarla a su familia que formaba parte de la burguesía francesa. Se mudó a Francia donde su infancia fue fracturada por una violación a los diez años de edad y en la adolescencia fue internada en un reformatorio.
     Los jóvenes franceses de la posguerra fueron expuestos a una estricta educación gracias al modelo de integración social francés que se ofreció a jóvenes huérfanos, pero también a jóvenes con padres que más bien parecían ser sus abuelos y cuyo abismo generacional no permitió una sana relación. Albertine pasó más tiempo en el reformatorio que con sus padres entrados en años, cuando salió del reformatorio logró muy buenas notas, con un mundo por delante se mudó a París y ahí se reencontró con una compañera, con ella efectuó un robo y fue condenada a siete años de cárcel, pero al tercer año escapó, la fuga ocasionó que se rompiera un hueso del talón llamado astrágalo, y es así como nombró a su primera obra.
          El astrágalo es su novela más representativa, fue publicada en 1965 y en ella relató la fuga y el encuentro con el que sería su pareja hasta su muerte, Julien Sarrazin, su protector, su apoyo y gran amor. La novela relata a detalle diversos personajes que se transforman en cómplices de su clandestinidad. Luego escribió La fuga y su última novela fue El atajo, pero fue aún más prolífica su escritura pues publicó además: Diarios de prisión  y Cartas a Julien.
     Toda su vida influyó en la temática literaria de sus obras, que se ubicaron dentro de la literatura proletaria francesa del siglo XX, como características principales de dicho género sobresale que los escritores son trabajadores, jóvenes, autodidactas que brindan un testimonio de la manera y el ambiente social en el cual viven, una vida marginal en la Francia de la reconstrucción.
      Albertine Sarrazin fue una escritora que luchó contra la represión y el sometimiento, su búsqueda de libertad la llevó a relacionarse con delincuentes, pero su talento natural para la escritura dejó en claro su postura existencial e intensa, algunos acercamientos a su trabajo literario hablan del frecuente uso de un lenguaje argótico, es decir, un lenguaje utilizado por un determinado grupo social, su empleo tiene una intención expresiva y una capacidad relacionada con cierto ambiente sociocultural lleno de vulgarismos. El argot utilizado por ella formó parte del ambiente delincuencial donde vivió, pues no tuvo muchas opciones; sus vulgarismos son lo de menos, lo mejor es que se le ha integrado como representante de la literatura contemporánea francesa.
    Su obra retrata su alcoholismo, su total dependencia, su rompimiento, su transgresión al estrecho destino que le tocaba. Aún no sé si logró una concientización feminista, o tan sólo se trató de ese feminismo espontáneo que se provocó por sus violentas experiencias en el yugo de una ideología patriarcal que la sometió hasta donde pudo.

     Su postura rebelde fue parte de las ansias de libertad, una libertad ajena para mujeres inquietas, creativas, pensantes, críticas, esa opción de ser estaba prohibida en un ambiente social marginal y además ella se convirtió en discapacitada por su lesión en el astrágalo, y en la sala de operaciones falleció un 10 de julio de 1967,  a los 30 años de edad,en un claro entorno discriminatorio y represivo al que se enfrentó Albertine, mujer joven y talentosa que retó al sistema de integración en la Francia de los años sesenta. Fue la única mujer escritora con esta temática carcelaria de fin de siglo.
 Albertine Sarrazin enciende las luces en oscuros rincones de la justicia en su país, su experiencia, su amor por quien la salvó y su vida como fugitiva son los principales elementos de su estilo que pone en duda las normas sociales del momento en el cual vivió.  


viernes, 3 de julio de 2015

Laura Méndez de Cuenca

Poetisa y profesora mexicana nacida en el siglo XIX un 18 de agosto de 1853, a ella le tocó vivir las leyes de Reforma que promulgaron, entre otros cambios sociales, la educación en manos de Gabino Barreda y el positivismo que implantó en nuestro país, todos y todas debían ser instruidos, comenzaron a construirse las escuelas de artes y oficios, en ellas se impartía la carrera de docente.
     En ese ambiente la escritora conoció a Guillermo Prieto e Ignacio Manuel Altamirano, cuya amistad conservó hasta su muerte. Gracias a su talento para la poesía conoció a Manuel Acuña, con el cual tuvo un hijo natural, situación muy difícil para la poeta por la construcción de cómo debería comportarse una mujer, luego, se complicó con el suicidio de Acuña en 1872 y al año siguiente la muerte del pequeño.
     Desde esta época los poemas de Laura Méndez de Cuenca mostraron un dolor al abandonar toda esperanza de vivir junto a Manuel Acuña, pero su fuerte temperamento y decidida conducta rebelde hacia los convencionalismos sociales le permitieron seguir adelante concentrándose entonces en su pasión por el aprendizaje.
      Años más tarde, después de cuatro hijos naturales se casa con el poeta Agustín F. Cuenca, con quien procreó siete hijos en total y con quien tuvo una tormentosa relación hasta la muerte de éste. Cuento algunos pormenores de su vida para que puedan imaginar como la poetisa combatió el oscurantismo de la época con una intensa postura feminista, participando en un ámbito laboral masculino por costumbre, preparada, enfrentó un ambiente hostil y escribió sobre la importancia de la preparación de la mujer, así que, coherente con sus teorías en 1885 se titula como profesora.
      En 1891 fue a vivir a la ciudad de San Francisco California, en ese momento ya territorio de E.U, hecho que se calificó como uno de sus arranques varoniles, ya que sus actos resultaban contrarios a los valores femeninos que la mujer seguía.
     Esos años la fortalecen y le dan el vigor y la libertad que como poetisa necesitaba, su trabajo se enriqueció y en esa época escribió poesía, cuento y una novela costumbrista titulada El espejo de Amarilis, así como artículos periodísticos. De igual manera continuó su formación y aprendió varios idiomas e impartió clases de español. El reconocimiento por su trabajo lo consiguió en esa ciudad, pues fue el momento en el cual vivió con mayores comodidades, sin ser señalada y con una remuneración digna.
     Después de una década de vivir en el extranjero, vuelve a México y se integra al nuevo siglo y a la situación moderna del país, pero la vida le fue quitando a sus amados hijos hasta quedar sólo con Alicia, quien en 1910 se internó en el Manicomio “La Castañeda” y le sobrevivió. De igual manera que en el pasado, nada pudo frenar su constante formación y viaja a Berlín donde las nuevas pedagogías y disciplinas educativas estaban en auge, a su regreso a nuestro país se encontró con el estallido de la Revolución Mexicana, en esa época Laura es recluida en un poblado de Milpa Alta y elevada a inspectora.

     Su trabajo poético pasó por tres etapas: el periodo inicial comprende sus poemas iniciales de búsqueda que se publicaron de 1873-1875; la segunda etapa fue la plenitud creadora entre 1884-1905 y la tercera etapa se caracteriza por las nuevas temáticas y la innovación en la forma, va de 1915 -1928. En su obra se mezclaron los elementos clásicos con la clara  influencia romántica y además de sus incursiones en el modernismo, pero también a través de su obra hizo crítica social guiada siempre por su sentido ético. 
     En su escritura estuvo presente la rebeldía, en sus poemas la voz de la protesta y en su práctica pedagógica aplicó nuevas teorías, incluso se ha dicho que podría ser considerada la poetisa más destacada del siglo XIX y a pesar de ello es una escritora olvidada. Muere el 1 de noviembre de 1928 en la ciudad de México a la edad de 75 años. 


viernes, 12 de junio de 2015

Julia de Burgos

Poetisa nacida en Carolina, Puerto Rico el 17 de febrero de 1914, su nombre completo fue Julia Constancia Burgos García; en su pueblo natal tuvo el privilegio de recibir estudios secundarios,  y a los 19 años recibió el título de magisterio por la Universidad de Puerto Rico. Su trabajo poético tuvo algunas influencias, por ejemplo Pablo Neruda, Rafael  Alberti, y Clara Lair. Formó parte del grupo feminista llamado “Hijas de la libertad”, perteneciente al Partido Nacional de Puerto Rico y cuyo propósito era la independencia de la isla.
     En su obra sobresalen temas que debaten los códigos sociales a los cuales eran sometidas las mujeres en esa época, ella utilizó su obra como el medio para romper con  los convencionalismos que ataban a la mujer y buscó la dignificación de la mujer, al mismo tiempo que  las estimuló para conseguir un mayor análisis de sus derechos y libertades.
     Julia de Burgos reflejó tristeza en su poesía, la lucha política que su pueblo sufría, la muerte y un tema básico: la naturaleza estuvo presente como cimiento en su obra; algunos poemas como: “Rio grande de  Loíza”, “Agua, vida y tierra”, “El rival de mi río”, etc.,  son ejemplo de su relación con el entorno, sobre todo hay que reconocerla como una escritora feminista; hay dos claros retratos de ella en sus poemas más representativos: “Yo fui mi ruta” y “A Julia de Burgos”[1] 
     En 1946, tras una serie de amores perdidos se quedó a vivir en New York donde consiguió toda clase de empleos, desde, inspectora de una óptica hasta empleada de un laboratorio químico, pasando por oficinista y costurera. Esta etapa de su vida coincide con la desventurada fortuna y el consumo excesivo de alcohol que la hizo depender de la bebida, situación que se sumó a la enfermedad que sufría y la llevó a la muerte el 6 de julio de 1953. En una avenida de Manhattan su cuerpo se desplomó y murió más tarde en un hospital cercano. Sin encontrar documento alguno que la identificara, su cuerpo fue sepultado en una tumba con el nombre de “Jane Doe”. Meses después sus amigos y familiares localizan sus restos fúnebres y los trasladaron a su natal Puerto Rico. Actualmente su cuerpo yace en el cementerio de Carolina, el pueblo donde nació.
     Ha tenido homenajes y reconocimientos póstumos, pero sobre todo se le reconoce como poetisa feminista cuya obra mostró una intención critica, pese a las dificultades del momento histórico, ella tuvo una brillante obra que se apoyó en el trabajo de difusión que hizo de sus poemas, tal vez son razones suficientes por las que fue considerada la más grande poetisa de Puerto Rico.



Han Kang

  Escritora surcoreana nacida el 27 de noviembre de 1970 en el seno de una familia de formación literaria, desde su padre novelista, hasta s...